Un presunto procedimiento irregular tuvo lugar en la zona de 133 y 44, en San Carlos, donde efectivos de la Policía de La Plata detuvieron a dos personas que circulaban en moto y hallaron envoltorios con droga. Sin embargo, lo que llamó la atención fue una secuencia poco convencional que, según testigos, incluyó la participación de una repartidora de Rappi a quien le habrían entregado las pruebas para que las llevara a la comisaría. Este punto, no obstante, fue negado por fuentes policiales al ser consultadas.
El episodio habría ocurrido durante un operativo de rutina, cuando los agentes interceptaron a un hombre y una mujer. Según trascendió, durante la requisa se encontraron 11 envoltorios con lo que sería cocaína, con un peso total aproximado de 19 gramos. Ambos fueron aprehendidos en el lugar.
De acuerdo con el relato de la joven trabajadora de delivery, los efectivos le habrían pedido actuar como testigo del procedimiento, y posteriormente le habrían entregado la droga, el dinero y otros objetos para que los transportara hasta la seccional. Ella habría guardado los elementos en su mochila y, siempre según su declaración, realizó una entrega pendiente antes de dirigirse a la comisaría, escoltada por una oficial. Esta versión también fue puesta en duda por fuentes vinculadas a la fuerza, quienes aseguraron que el procedimiento se ajustó a los protocolos vigentes.
Una vez en la comisaría, la joven habría colaborado en el conteo del dinero y presenciado el test orientativo sobre la sustancia, que habría dado resultado positivo.
La defensa del conductor de la moto pidió que se investigue penalmente a los policías involucrados y a la propia testigo civil por los delitos de “tenencia y transporte de estupefacientes”. Además, solicitarán la nulidad del procedimiento y el cese de la prisión preventiva del acusado, argumentando posibles irregularidades.
Otra versión que surge del expediente señala que los propios efectivos habrían debatido qué elementos incorporar al acta policial, centrando el foco en la droga y el dinero, y dejando de lado otras pertenencias halladas en la mochila del detenido. Sin embargo, este detalle también fue rechazado por voceros policiales.
La causa, que ya está en manos de la Justicia, genera inquietud por el presunto accionar inadecuado de los efectivos, en especial por el rol que habría cumplido una civil en el traslado de pruebas clave.
